Wednesday, November 23, 2005

Otro concierto fallido: Pearl Jam

Aquí estoy, en mi hogar. Y no estoy siendo participe de ninguna manifestación del arte más que escribir este resentido texto. Porque claro, Pearl Jam esta en Chile y bueno, yo no lo pude ir a ver. Aquí es cuando alguna voz desorientada podría decir: ¿Y cual es la importancia de este grupito? Oh, mis lectores. El tiempo nos lleva de vuelta a los principios de los años 90, un mundo diferente al que yo mire con ojos inocentes.
Nuestro país logró pasar a la democracia en esta nueva década siendo de importancia al pais. Obviamente la efervescencia política hizo que la mayoría de nuestros padres se inscribiera y fuera a votar (evitando que de nuevo pasaron cosas "curiosas" como el plebiscito del 80) y los ideales cayeron luego, para una gran porcentaje, para depositarse en una realidad. Y claro, porque en rigor no se podía cambiar mucho. El descontento reina en la juventud como más de alguna vez se nos hizo saber. El "no estoy ni ahí" se volvió casi un cliché reflejante de una generación sin rumbo, la llamada Generación X, sacada de un libro de un tipo de cuyo nombre no me acuerdo. Esto fue diferente en Estados Unidos, es más, ahí esta la historia oficial, no su versión chilensis, pero claro, las cosas se pegan.
En lo musical esto se evidencio con el despido de otra generación musical. Esa generación se caracterizaba por dos pináculos: Pop (arghhh) y rock (arghhh). El pop no es difícil de imaginar, Michael Jackson y Madonna se nos viene de inmediato pero es cosa de ver un rato de videos de esas épocas y vemos lo terrible de esa época (obviamente esta es mi opinión) con la degeneración de todo lo que tiene buen nombre. Pensemos en Milli Vanilli, Culture Club, y tantos otros. Querámoslo o no este genero dormiría un poco para ser rescatado por los hijos desgraciados de esta generación, asiduos de ciertas discotecas nocturnas en la actualidad. El rock era la misma historia: Sobrecargados estéticamente y musicalmente porque hay que recordar que el sintetizador vivió su denigración en esta época, las guitarras llegaron al extremos de la saturación con su técnica y las baterías eran lo mas aburrido y plano si es que había una. Las opciones clásicas eran Guns’ n’ Roses (arghh) y Metallica (juntos hicieron una gira y quedo la tendalada, serio). Quiero dejar en claro que otros grandes valían la pena en esta época, no olvidemos a The Cure o U2 para que no piensen que soy tan malevolo.
Bueno, Dangerous de Michael Jackson fue destronado por Nevermind de Nirvana y llegó el movimiento grunge (pasare rápido porque me quedo sin tiempo) que con gran intensidad duró como mucho 3 años. Debo reconocer que yo, en plano estético, simpatizó con este movimiento: camisas leñadora y jeans...¡Bien! y también en plano musical porque esta música tiene una característica que otros no comparten: Parece sincera. Y efectivamente, escucha una canción como Jeremy o como All Apologies y podrás darte cuenta como esas voces desgarradas evidencian un verdadero desgarramiento interno, una vida en que las ilusiones se caen en pedazos.
Una generación de unos 3 o 4 años se unió a este movimiento adoptándolo y algunos desfasados como yo los rescatamos de diversas maneras y quiéranlo o no esto fue importante (si hasta sale en el Artes y Letras)y el único gran exponente que ha llegado a Chile es la banda de la que se habla tanto, banda que decidió no sacar videoclips y pelearse con Ticketmaster. Bandas que a pesar de no estar en los 10 más pedidos agotaron rápidamente las entradas de su primera noche. Porque es una experiencia nostalgica estar ahí presente y obviamente así lo sentirán todos los que disfrutaran de la musica. A la larga el rock siempre apela a la nostalgia.
Mi primer encuentro con Pearl Jam fue, para variar, con mi padre. Él se percató de que este grupito no era una moda pasajera y aprovecho de grabar el unplugged y un par de videos. Las canciones entonces me fueron familiares en su época correcta sin contar obviamente la influencia de otros medios. Años después escucharía el disco Ten con los oídos más entrenados para ello. Los primeros ruidos casi ritualescos sorprenden un poco antes de tirarnos una música agresiva y doliente. Estos tipos descargan una canción tras otra con una calidad abismante: Even Flow, Alive, Black, Jeremy. Particularmente siempre me llamó la atención y el cuidado de la banda con algunas joyitas tranquilas y en especial Oceans, un paisaje diferente y hermoso, contraste entre tanta rabia y descontento. Eso fue el grunge, almas tristes que hicieron una pataleta fuerte pero corta, eran frágiles y nadie se percato. Ahí están esas canciones para demostrarlo y ahí esta el suicidio de Kurt Cobain para demostrar que al igual que los hippies, son personas muy necesitadas, que no soportaron la indiferencia de un mundo que simplemente avanza.

1 comment:

  said...

Quedó como para revista...o quizá yo soy muy chupamedias?
Milli Vanilli...arghhh!