Monday, December 13, 2004

Perdedor

Creo que siempre tuve una visión del perdedor como una compasión, una compasión que parecían no tener los superhombres que los aventajaban. Quizás siempre me considere un perdedor de cierta forma, no quizás, me consideró un tipo de perdedor (claro, no tengo ni idea que tipo).
Cuando pequeño me daba una tristeza absoluta el pobre gato Silvestre. El felino parecía no tener buena suerte en el estómago y solo podía saciarse con animales, y no cualquiera (vez que escribo me encuentro más parecido al mono este) sino que un canario y un ratón: Piolín y Speddy Gonzalez respectivamente. A Speddy lo soporto pero Piolín lo encuentro en extremo desagradable al punto que yo lo mataría pa dárselo al gato o se lo dejaría al descuidado destino. Es un pájaro mimado por una abuela, ni siquiera tiene la molestia de definirse sexualmente y vive una vida apacible en tranquilidad porque es el gato el que tiene que luchar por sobrevivir. Prácticamente es un problema social en el que yo soy el lindo minino. A lo mejor tengo mi comida, o quizás no pero aún así me empecino en un plato al que no estoy asignado. Como un buen terco (es probable que no se note pero puedo serlo por dentro como hartas otras cosas más) intento comer de ese delicioso plato y sólo obtengo frustración, derrota. No me puedo quejar, era eso lo que buscaba, es lo que busca un perdedor. Pero no seamos tan trágicos. De partida, he considerado el fracaso algo sumamente importante en la existencia y para eso hay que buscar algunos pocos ejemplos. El que se viene a mi mente es Dragon Ball (no Z, por favor, y menos GT) y el famoso torneo donde el Maestro Roshi se disfraza para evitar que Goku obtenga una victoria segura. La victoria no hubiera sido buena para él en ese momento y le hubiera impedido gratificaciones futuras. Esta bien, esta bien, la pregunta es cuando yo?!
A Goku no le tomo mucho tiempo, a veces la oportunidad baila enfrente tuyo, te sostiene un rato y luego se va para siempre. ¿Victoria o derrota? Derrota, pero derrota nunca significo de por si algo malo, la competencia lo ve negativo, o sea nosotros. Más ejemplos: Felicity. Rara experiencia para mi. La única serie de tipo jovenes-romanticos-entrando-en-la-adultez (adultez?!) que me he tomado tiempo de verla. Primero la curiosidad, además de algún comentario en la revista del cable, y luego a disfrutar. En la serie la protagonista se desvive por dos sujetos: Su amor imposible de la secundario que persiguió hasta la universidad y el sujeto un año más avanzado que cuida el apartamento ese donde se supone que viven los universitarios. De primera uno se identifica con un personaje (como el power rangers con el que jugabas más: El azul para mi) y yo queria que el ultimo sujeto se quedara con la tipa esta porque el la sufrió harto, la tuvo un tiempo, la perdió por una lesera, luego líos por ahí y por allá y casi la recupera al final. Hubo un momento de calma cuando este compadre se consiguió otro amor, uno se estaba encariñando con el nuevo personaje hasta que esta tipa lo engaña. Resultado: Nuestro amigo queda más quemado aún. Mientras que el otro era un sobrado desde el principio. Su posición privilegiada le permitía darse lujos de hacer enojar a la protagonista como si nada y sin contar todas las embarradas que sería largo de contar. Bueno, cof, me dio lata al final porque este compadre tuvo que aceptar nomas la situación. Igual termino bien su vida pero con alguien que apenas salió como para entender lo que paso. Además son siempre los perdedores los que deben dar el paso al lado, los que deben ceder para que los ganadores sean felices. Gracias a la derrota otros son felices. Humprey Bogart tiene que ser fuerte y dejar a la dama en Casablanca o el mismo sacrificio es un acto de sufrimiento para uno y felicidad para otro. El otro ¿comprende el sacrificio, le interesa?. Todavía me da cierto enojo que en las películas de Cristo muestran a Judas desde el principio con cara enojada. Era igual a los demás, el destino lo diferenciaría en otro momento. El mundo de las leyes esta lleno de ganadores y perdedores pero creo que en muchas casos esto no esta correcto. Cuanta gente que ya ha perdido bastante y busca un reconocimiento público o quizás algún tipo de indemnización (que en ningún caso es mejor que lo perdido o toda la lata de por si del proceso penal) y no lo logran. Ya no deberían seguir perdiendo y sigue pasando, una de las razones por lo que las leyes me atraen, para estar en el bando que ya ha perdido pero que ya es suficiente.

Bueno, ya he dicho mucho y creó que debí haber perdido el hilo más de una vez. Es recomendable escribir para liberarse un rato de tanta basura asi que háganlo con frecuencia, no importa si es leído o no porque si escriben puras tonteras van a terminar con un blog como este. Como comentario final quiero aclarar que no estoy buscando la derrota. Un perdedor no hace eso sino todo lo contrario. El perdedor es el que tiene la mejor concepción de lo que es la victoria, más que nadie. La entiende, la añora pero no le pertenece. El que más la desea y no la obtiene pero ahí entra la fe, les guste o no, la victoria no le llega al perdedor o no de la forma esperada. Nunca fue una certeza y cuando este ya no va a ser lo que es sino el mejor fracaso de todos, el de tu propia excepción a la regla. Negativo?, no creo.

PD: Si vieron Promedio Rojo y especialmente el final lo dice todo: un perdedor lo es siempre, como sea