Libres somos, como nunca fuimos destinados a serlo.
Destino amargo e inútil como el café frío,
que bebes mirándome con ojos de ensueño roto
a mi caída de miserables lágrimas.
Esta es una serie de espaciados, un poco inconexos y carentes de originalidad pedazos de texto que yo, vuestro leal pero inconstante servidor, escribe para este grupo de alrededor de 5 lectores que estimo en sobremanera por su fidelidad. Lo mejor sin duda son las letras de canciones y lo peor el resto. Vale la pena? Yo que se...
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